Desde pequeños nos enseñan a buscar tener siempre la razón, a que solo hay una respuesta correcta. Pero después llegamos al mundo y nos damos cuenta de que no podríamos haber estado más equivocados, pero para cuando nos damos cuenta es tarde
Ya hemos incorporado la mentalidad de que solo debemos ir a por algo cuando estamos seguros, y si no lo estamos nos consume el miedo y somos incapaces de dar los pasos necesarios para seguir adelante
El miedo evita que seamos pro activo y sigamos nuestras metas. Y cuando decidimos avanzar aun así y cometemos algún error, nos molesta incluso más admitir que lo hemos cometido que el hecho de que lo hayamos cometido
Esto hace que vayamos acumulando pequeños fallos y errores pero que no los resolvamos hasta que con el tiempo se expanden tanto que somos incapaces de hacer algo al respecto.
Por eso lo más importante si queremos tener alguna oportunidad de conseguir lo que nos proponemos, es que estemos dispuestos a dar el primer paso aunque haya posibilidades de fallar, y aceptar los errores que vayamos cometiendo en el proceso y aprender de ellos
Porque si no somos capaces de aprender de nuestros errores lo único que nos espera es un fracaso mucho más grande.
Tratemos todas las ideas como hipótesis hasta que se demuestre lo contrario
Una de las razones por las que nos cuesta tanto aceptar nuestros errores es que, sin darnos cuenta, consideramos que las respuestas y acciones que tomamos son parte de nosotros.
Por eso, admitir que hemos hecho algo mal, es lo mismo que ‘’insultar’’ a nuestro yo del pasado y afecta a nuestra confianza en nosotros mismos.
Para evitarlo Syed nos recomienda que tratemos a todas nuestras ideas como hipótesis, esto significa que todo lo que pensemos puede estar mal y que cada acción que tomamos tiene el objetivo de ver hasta qué punto nuestra forma de ver el mundo es correcta y hasta qué punto tenemos que recalibrarla
De esta forma cada acción que tomamos y que no da el resultado esperado se convierte en una oportunidad de aprender y acercar nuestra visión del mundo a la realidad.
Si simplemente seguimos adelante sin corregir, lo único que pasará es que admitiremos que no nos importa seguir equivocandonos, porque hemos demostrado que no entendemos el mundo
Si en cambio lo aceptamos y cambiamos nuestra forma de verlo estaremos mucho más cerca de hacer acciones correctas que den el resultado que queremos. Aceptemos que no sabemos nada del mundo y que todo es un experimento en proceso

Descubre nuestros mejores artículos en tus redes favoritas

Domina lo mejor de lo que otras personas han descubierto
Únete a Nuestra Newsletter y descubre las mejores ideas, conceptos y prácticas de una amplia gama de disciplinas.


Tendemos a evitar verdades incomodas
¿Hemos visto un avestruz enterrando su cabeza en la arena, o al menos una foto…
Las empresas son instituciones sociales
El economista austriaco Karl Polanyi conectó la psicología y la economía cuando enfatizó la importancia…
Hoy en día, sin embargo, el conocimiento se ha vuelto más accesible, más abundante, más global y más complejo
En 1995, los autores Hirotaka Takeuchi y Ikujiro Nonaka publicaron su influyente libro The Knowledge-Creating…
En lugar de obtener un conocimiento, debemos centrarnos en la práctica del conocimiento.
¿De qué sirve tener conocimiento si no le damos un buen uso? ¿Y qué tipo…
Muchas personas defienden la importancia de una agenda , pero por sí sola no mejorará mágicamente nuestras reuniones
Varios estudios no han podido encontrar ninguna asociación entre la presencia de una agenda y…
Como era de esperar, las expectativas en torno a las reuniones varían de un país a otro
En América Latina, por ejemplo, es bastante común que las reuniones comiencen mucho más tarde…